Reconocimiento y expresión de las emociones

Abstract

El sistema educativo actual debe afrontar el reto de preparar a futuras generaciones en una sociedad en constante cambio. Siguiendo los principios básicos de la corriente pedagógica de la Nueva Escuela, emoción y conocimiento deben ir de la mano: pues todo ser humano es un conjunto entre intelecto y emociones. Sin embargo, se sigue dando mucha más importancia a la adquisición de conocimientos que a la educación emocional. Frente al desafío en las escuelas por romper con esta actitud tradicional, el docente tiene la responsabilidad de actuar como guía para que los niños sean capaces de afrontar su porvenir. A través de la interrelación entre lenguaje, literatura, arte y educación emocional, he desarrollado un Trabajo de Fin de Grado que pretende abordar una situación real con un grupo de alumnos de 3 años. Ante la escasez del vocabulario emocional que empleaban, vi la oportunidad de ayudarles a desarrollar su inteligencia emocional empleando diferentes recursos de manera integral. A lo largo de 6 meses, he podido observar una clara evolución respecto al reconocimiento y expresión de las emociones por parte de los niños. Durante esta experiencia he podido afirmar la complejidad de la labor como docente, en la que la vocación es fundamental para establecer un vínculo con los niños y poder prepararlos para la vida.