Los derechos del menor víctima en el proceso penal de menores

Abstract

In the criminal process of underage children, the victim has been always forgotten. From the European perspective, the omission of the Framework Decision, due to the fact that it is non- binding, has led to the obligation of the member States of the European Union to create a regulation which establishes some minimum basic common rights to the European Union, which has reflected in Spain in the passing of the legal Statute of the victim and the modification of the Law of Criminal Procedure, related to what is stated in the directions 2012/29/UE of the European Parliament and the Council of the 25th of October, 2012. This affects also the environment of the underage who are considered especially vulnerable victims due to their lack of development and their greater easy way to suffer from a secondary victimization derived from the legal process, which causes a especial regulation in which they are given an additional protection. This involves not also a right for the underage victim but also an obligation for the state, which will be in charge of the accomplishment of those rights and for the protection with priority of the higher interest of the underage child, punishing if necessary, the non- accomplishment of that exercise of rights. Although it is true that, due to the underage child inability to act in the criminal process, in many occasions, those rights will be extended to the legal representatives of the underage child as well as to the parents or legal tutors.

En el proceso penal de menores la víctima ha sido la gran olvidada, desde la perspectiva europea, la omisión a la Decisión Marco del Consejo de la Unión Europea de 15 de marzo de 2001 debido a su carácter no vinculante ha desembocado en la obligación de los Estados miembros de la Unión Europea a crear una regulación que establezca unos derechos mínimos básicos comunes a los países miembros, que en España se ha reflejado en la aprobación del Estatuto Jurídico de la Víctima y la modificación de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, en atención a lo establecido en la Directiva 2012/29/UE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 25 de octubre de 2012, ello afecta a su vez al ámbito de los menores pues son considerados víctimas especialmente vulnerables debido a su falta de desarrollo y a su mayor facilidad para sufrir una victimización secundaria derivada del proceso penal, lo que origina una regulación especial en la que se les otorga una protección adicional, esto comporta tanto un derecho para el menor víctima, como una obligación para el Estado, que deberá velar por el cumplimiento de estos derechos y proteger con prioridad el interés superior del menor, castigando si fuere necesario el incumplimiento de este ejercicio de derechos. Si bien es cierto que debido a la incapacidad de obrar del menor en el proceso penal, en muchas ocasiones, estos derechos se verán extrapolados a los representantes legales del menor así como a sus padres o tutores legales.