La perspectiva de género en la Administración Pública: la mujer en la Guardia Civil

Abstract

La perspectiva de genero en la administración publica puede conllevar dificultades de genero como veremos en este trabajo. La llegada de la mujer a las administraciones publicas tuvo un arranque lento, puesto que la historia nos ha demostrado la dificultad y desigualdad que han tenido que vivir las mujeres en el entorno laboral y social. La mujer en el Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (en adelante FFCCSE), ha sido un claro ejemplo de la discriminación. Hasta 1988 la mujer no pudo optar al ámbito laboral de los cuerpos policiales, cuyos puestos eran administrativos o técnicos dando como explicación, que su condición física impedía su competencia para realizar labores físicas, por lo que la mujer no ocupaba puestos de gran rango hasta finales de los años 80. Los datos actuales siguen dejando claro, la falta de igualdad en las FFCCSE, desde sus inicios hasta estos últimos años, las cifras han crecido en estos últimos años, pero muy paulatinamente, en 2018 se registro un poco mas del 7% de mujeres en la Guardia Civil. Podemos afirmar que este indicador nos sirve como guía de que la tendencia discriminatoria que hubo en algunos cuerpos de seguridad es cada vez menor. Las medidas de integración comenzaron en los años 90, y este año la Guardia Civil lanzaba la noticia de que debido al escaso numero de mujeres que hay en este cuerpo, se ha reservado un cupo de un 30% de las plazas disponibles para el acceso de mujeres. Esta medida ha causado mucha polémica puesto que, se trata de propuestas que pueden llegar a favoritismos en lugar de igualitarias. Pero hay que recordar que se trata de una medida que pretende compensar la enorme diferencia que existe entre el ingreso o presencia de mujeres en la Guardia Civil. Pero el mayor problema de la falta de aspirantes mujeres a estos cuerpos viene por una falta de seguridad o certeza sobre el futuro que tendrán en los mismos, puesto que como veremos los altos cargos son de genero masculino, y esos datos nos dan una clara respuesta de que su carrera dentro de estos cuerpos, puede estar limitada.

The gender perspective in the public administration can lead to gender difficulties, as we will see in this paper. The arrival of women to the public administrations had a slow start, since history has shown us the difficulty and inequality that women have had to live in their job and their social environment. Women in the State Security Forces and Corps (hereinafter FFCCSE) have been a clear example of discrimination. Until 1988, women could not opt to the work environment of the police forces, whose positions were administrative or technical, giving as an explanation that their physical condition prevented their competence to perform physical tasks, so women did not hold positions of great rank until the end of the 80s. The current data continue to make clear the lack of equality in the FFCCSE, from its inception until these years, the figures have grown in recent years, but very gradually, in 2018 a little more than 7% of women were registered in the Civil Guard. We can state that this indicator serves as a guide that the discriminatory trend that existed in some security forces is decreasing. The integration measures began in the 90s, and this year the Civil Guard released the news that due to the number of women in this body, a quota of 30% of the available places have been reserved for women. This measure has caused much controversy since it is about proposals that can reach to favor rather than to be equal. But it must be remembered that this is a measure that aims to compensate the enormous difference that exists between the entry or presence of women in the Civil Guard. But the biggest problem of the lack of female applicants to these bodies comes from a lack of security or certainty about the future they will have in them, since, as we will see, the senior positions are male, and these data give us a clear answer that their career within these bodies may be limited.