Vigilancia de la salud en embarazadas durante sus jornadas laborales

Abstract

Durante este trabajo analizaré la vigilancia de la salud en mujeres en situación de embarazo y los diferentes agentes que las afectan en su lugar de trabajo. El número de mujeres trabajadora en edad reproductiva va en aumento año tras año, su especial susceptibilidad frente a la acción de los agentes químicos, biológicos, y físicos, aumenta la morbilidad y mortalidad de la madre y el feto. Desde que entró en vigor la ley 31/1995 de prevención de riesgos laborales, empresas ha iniciado actuaciones preventivas para evitar o disminuir los riesgos a las que están expuestas las trabajadoras. La legislación española, a través del RD 298/2009, implementa la directiva 92/85/CEE, donde se recogen diversos agentes y condiciones de trabajo que de una manera u otra pueden tener una incidencia en el estado biológico de la mujer embarazada o en periodo de lactancia natural. Otra ley que ha sido de mucha importancia es la 39/1999 del, 5 de noviembre, tendrán derecho a una hora de ausencia al trabajo, que podrán dividir en dos fracciones, si la trabajadora por su voluntad podrá sustituir este derecho por una reducción de la jornada laboral en media hora. El embarazo comienza con la fecundación de óvulo que luego se implanta en el útero y empieza el embarazo, este pasara por 3 etapas llamados trimestres, cada trimestre tiene sus propios eventos importantes. El primer trimestre es el período de mayor fragilidad, durante el cual se forman todos los órganos y sistemas principales. La mayor parte de los defectos congénitos y los abortos espontáneos se producen en el primer trimestre. Durante el segundo y tercer trimestre, el feto se forma por completo y crece y madura con rapidez, se debe controlar, hacer seguimiento de estas etapas por medio de la vigilancia de la salud, por medio de la recogida sistemática de datos acerca de un problema específico de la salud. El reconocimiento y la evolución de los riesgos en los puestos de trabajo durante el embarazo disminuye la posibilidad de que se produzcan efectos adversos para el feto y la madre que estarán en condiciones de trabajar hasta el final del embarazo. Las obligaciones legales del empresario en lo relativo a la mujer gestante o que ha dado a luz, frecuentemente se desarrolla en torno a la evaluación, información, formación y la vigilancia de la salud y la adopción de las medidas preventivas, utilizando los instrumentos que estén a su disposición para eliminar o reducir los riesgos. En los casos que los riesgos no se puedan eliminar se procederá al cambio de puesto de trabajo o de función a otro compatible con su estado, dentro de su grupo profesional o categoría equivalente; de resultar imposible este proceso se iniciara la suspensión del contrato por riesgo durante el embarazo o lactancia natural, durante el tiempo que sea necesario para la protección de su seguridad o de la salud y la del bebé, como lo establece la ley 39/1999, de 5 de noviembre para promover la conciliación de la vida familiar de la trabajadora.